viernes, 29 de noviembre de 2013

¿Tenéis plan para el sábado?

El sábado 30 de noviembre de 10:00 a 13:00 y de 16:00 a 20:00 en la plaza del ayuntamiento de Santander se desarrollarán diversos talleres para niños y un trivial gigante para jugar en plan “juegos en familia”.

Es ésta una iniciativa organizada por la Dirección General de Comercio y Consumo que se incluye dentro del Programa para el Consumo: CONSUMOLA.

La jornada se basa en una serie de actividades y juegos para los escolares de nuestra región para que aprendan los derechos y deberes del consumidor de una forma divertida y amena. Además, los participantes podrán ganar premios como entradas y  pases familiares anuales para el Parque de la Naturaleza de Cabárceno. Se desarrollarán diferentes actividades y talleres para niños y sus familias como: “Cuentacuentos cada hora para niños de todas las edades”, “Pinta y colorea”, Gran Trivial gigante de los derechos para jugar junto con sus padres etc.

Lamentamos no haber podido avisar de esta actividad con más tiempo, pero si te mandan el correo el día 28 para una actividad del día 30 el margen no es muy grande ¿verdad?. No obstante creemos que merece la pena avisar así, a contrarreloj, ya que es una iniciativa que nos ha parecido muy interesante porque fomenta la educación fuera del aula en algo tan necesario como el consumo, que tenemos que dominar de por vida, y también permite realizar actividades en familia, cosa que los niños disfrutan muchísimo más de lo que nos podamos imaginar.

jueves, 28 de noviembre de 2013

¿Qué tiene mi niño?



Lunes 10 de diciembre a las 17:15 en el Colegio Atalaya: Charla sobre el TDAH  (Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad) a cargo de Dª Mar Díaz de la Fundación CADAH.


Todos conocemos o hemos visto niños que entran en la categoría de los que “no paran”. Los encontramos en el parque, en el aula de nuestros hijos, en la consulta del médico, en las vacaciones y otras veces somos nosotros los que tenemos en casa al niño que no para.

A la hora de buscar excusas para el “no parar” las hay de dos tipos:

Si el niño es el nuestro entonces es que el crío es muy inquieto, es que tiene una personalidad muy marcada, es que los otros niños no le comprenden, etc.

Si el niño es de otro entonces se practica el lanzamiento libre de hipótesis: es que el niño está sin criar, es que sus padres están separados, es que los abuelos le consienten todos los caprichos, es que sus padres no miran lo que hace, es que la profesora no le riñe, etc.

Y es que vemos la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio, a veces no vemos que nuestros hijos sencillamente se están portando mal o, en el otro caso, somos muy osados hablando de la vida de los demás cuando nos es totalmente ajena. Y es que ¿nos hemos planteado seriamente por qué un niño no para? porque el motivo puede ser cualquiera de los anteriores, pero nos olvidamos de una probabilidad muy seria: que puede estar enfermo.

Cuántas veces no nos hemos quejado de algo como: es que no me escuchas, no me prestas atención, haz lo que te te digo y no lo que te da la gana, céntrate en los deberes y deja eso otro, pero dónde metes los colores y la goma que nunca están en su sitio, siéntate de una vez y estate quieto, piensa lo que estás haciendo y no seas bruto, no corras tanto y fíjate lo en lo que escribes que te faltan la mitad de las letras, etc.

Quien más quien menos todos hemos pasado por alguna prueba de esas, lo malo es que si hemos pasado por demasiadas tal vez lo que nuestro hijo tenga sea un TDAH y nosotros no tengamos ni idea. También se da el caso contrario, el de padres que están convencidos de que su hijo es hiperactivo cuando no lo es.

Para resolver esta cuestión vamos a tener la oportunidad de asistir en el propio colegio a una charla sobre el TDAH, nos parece un tema muy interesante porque nos puede ayudar en muchos aspectos: en saber si nuestro hijo puede tener la enfermedad en vez de un carácter de mil demonios, en descartar la posibilidad de que sea el trastorno lo que tiene y.-nos quedemos con el carácter de mil demonios y, muy importante, que nos ayude a comprender y a tolerar a aquellos que lo tengan.     

Esperamos que la conciliación laboral-familiar os permita asistir a esta charla, de la que mostramos  a continuación el cartel, y allí nos veremos.



Charla TDAH Fundación Cadah

Fecha: 10 de diciembre a las 17:15 horas 
Ponente: Dª Mar Díaz de la Fundación Cadah.



martes, 26 de noviembre de 2013

¡Cuidado!... se rueda

El año pasado por estas fechas recibimos una petición de colaboración por parte de la Fundación Maphre, se trataba de la difusión de un proyecto gratuito orientado a la educación vial para niños. Como el proyecto nos pareció interesante publicamos la entrada Pi, pi, piii… po, po, pooo… fuera de la vííía que paso yooo.

Este año han vuelto a ponerse en contacto con nosotros para informarnos de las novedades del proyecto, las webs siguen siendo las mismas:

http://www.losmaspequenosyseguridadvial.com     para niños de 3 a 5 años
http://ninosyseguridadvial.com                                 para niños de 6 a 11 años


En ellas encontraremos vídeos, libros, juegos, concursos, actividades y más ideas para que los niños se diviertan aprendiendo las normas de circulación vial, muy útil en esta época en la que entra el invierno, los días duran menos y llueve muuucho, vamos, que o no apetece o no se puede salir de casa.


Este mes publicábamos ¿Qué leen nuestros hijos?  donde exponíamos la necesidad de supervisar la lectura de los menores para evitar sustos. Redundando en ese tema nos ha parecido interesante el apartado rincón de lectura, donde hay una selección interesante de libros relacionados con la educación vial, varios de ellos se pueden descargar de forma gratuita (algunos tanto en español como en inglés).

Los libros de libre descarga abarcan todas la edades, así podemos ver en La selva de Mario (3 a 5 años) cómo se ve el tráfico desde los ojos de un chiquitín.
Entre los libros para niños de 6 a 8 años encontramos Silvia y su triciclo, donde descubrimos a una niña tratando de conducir su triciclo por el carril bici según le han explicado los adultos, pero tropieza con un obstáculo insalvable… los adultos, que no hacen más que estorbar. Cuando uno lee Cuando Papá Noel se compró un camión puede sacar una conclusión muy clara y es que... llegados a una edad… si nunca te pusiste ¿para qué te pones?... mejor dejarlo estar. Con Julia, Pato y el espía descubrimos que la prudencia es la madre de todas las virtudes y que es conveniente que los peques estén prevenidos sobre los desconocidos (lamentablemente a veces también tienen que estar prevenidos sobre los conocidos).
Entre los libros para niños de 9 a 11 años está La bicicleta crecedera de Oscar, donde conocemos a un niño que es capaz de cualquier cosa por amor… hasta de portarse bien. Finalmente, con La banda de las ruedas locas tratan de desmontar estereotipos y de ver más allá de las apariencias.


Esperamos que os sean de utilidad las propuestas de esta web, y ya puestos también nos gustaría que los de la Fundación Maphre se marcaran un detallito si pretenden que les sigamos haciendo publicidad gratis, aunque tal vez eso sea demasiado pedir.

martes, 5 de noviembre de 2013

Asamblea General Ordinaria

Estimadas familias:

El próximo día 19 de noviembre a las 19:00 horas, en el Colegio Atalaya de Santander, tendrá lugar la Asamblea General Ordinaria de la Asociación de Familias de Alumnos para tratar los siguientes puntos:

1º.- Bienvenida de la A.F.A. a las nuevas familias.
2º.- Informe de actividades y liquidación de cuentas del curso 2012-13
3º.- Propuestas de actividades para el curso 2013-14
4º.- Cuota: propuesta de mantenerla en 18 €/familia/año.
5º.- Intervención de las Directoras del Colegio.
6º.- Ruegos y preguntas.

Más información en el blog de la Asociación:


Para contactar con la A.F.A. en el correo electrónico:


Santander, 30 de octubre de 2013.
El Presidente.

Nota: La Asamblea se reúne en segunda convocatoria pues en primera convocatoria, (mismo lugar y día y una hora antes de la indicada), no es previsible se alcance el quórum exigido.

domingo, 3 de noviembre de 2013

¿Qué leen nuestros hijos?

“El regalo de un libro, además de obsequio, es un delicado elogio"   (Anónimo)

En estos tiempos uno tiene la sensación de que ser padre es más difícil de lo que era antes. La conciliación familiar se nos hace en ocasiones muy complicada y tenemos que buscar y encontrar tiempo para escuchar a nuestros hijos, tiempo para disfrutar de ellos, tiempo para imponerles disciplina y tiempo para supervisar la tecnología que usan, el uso que hacen de internet o el tipo de televisión que ven.

Cuando hay que comprar un regalo un libro siempre es una apuesta segura, aquellos a los que les gusta leer miran el contenido de los libros hasta dar con lo que les parece que va a agradar más al niño en función de sus gustos o de su edad. Por otra parte están aquellas personas a las que no le gusta la lectura o, en otro caso,aquella gente mayor que sabe que no “conecta” con los gustos de sus nietos, es en estos casos cuando suele ser muy socorrido el dependiente de la librería, ya que uno le dice la edad y el sexo de la criatura, dos o tres cosillas más y entonces el librero muy atentamente nos va ofreciendo libros que le puedan ir bien, al final uno se fía, le parece que el libro es bonito, los dibujos están muy bien, compra el libro recomendado y se va tan contento.

Personalmente, suelo leer los libros de mis hijas antes que ellas, esa sana costumbre me ha llevado a censurar tres libros:
El primer libro censurado tenía un contenido político agazapado entre líneas muy poco recomendable.
El segundo empezaba como el inocente libro tipo “de dónde vienen los niños” y al final terminaba como una versión infantil del kamasutra, no es broma, había dibujos con mucha variedad de posturitas.
El tercero y más reciente se lo regaló un anciano pariente de mi hija con su mejor intención, el libro en cuestión aúna una edición muy esmerada y cuidada con unas historias de venganza, envidia, asesinato, canibalismo, satanismo y demás historias nada aptas para una niña de 9 años como era el caso.

Comentando en “Radio Patio” con otras madres  el caso del tercer libro me encontré con una que también lo tenía y lo censuró antes de que lo leyera su hija; a otra de las madres (que trabaja con niños) se lo dejé y lo llevó al trabajo, donde un equipo de trabajadores sociales y psicopedagogos infantiles quedaron horrorizados de que se vendiera ese libro para esa edad.

Otra madre en “Radio Patio” me dijo que son las editoriales las que marcan la edad recomendada para la lectura de cada libro, pero que a veces las librerías les echan un vistazo y pueden modificar el criterio. Honestamente, no sé de quién es la culpa, si es de la editorial que edita libros para unas edades que no son las adecuadas, o de la librería que debería mirar con más cuidado lo que vende, aunque no tengo ninuna duda de que lo hace con la mejor intención.

Y es que, al final, lo que sí está claro es que también vamos a tener que encontrar tiempo para leer los libros antes que ellos.